Está considerado el kilómetro cero de Galicia. Según uno de los hijos
ilustres de Lalín, el matemático José Rodríguez
González (más conocido como matemático Rodríguez), el centro
geográfico de Galicia está en Lalín.
En el Concilio II de Braga, bajo el reinado del Rey Teodomiro y en el año 572, se crean once Comitatus o Condados en la Diócesis de Lugo, siendo uno de ellos
el Comitatus Dezensis, con su capital en un
indefinido lugar de nombre Dezam, y que tenía sus límites entre el monte Sumio (Farelo), el río Arnoia (Arnego), Foxo y monte Carrio y parece que su primer Conde fue un tal Sinefredo Fernández
Arias de Temes. El nombre de Lalín apareció el siglo X, refiriéndose al
monasterio de San Martín, y las tierras que fueron trabajadas tiempo atrás por el colono "Lalino". Más tarde las heredaron los Condes de Deza. El nombre apareció en numerosos textos medievales y viene, supuestamente,
de un juego de palabras con "lana" y "lino", por la abundancia que de estos productos.
Hoy Lalín pertenece a la provincia de
PONTEVEDRA, es una villa, capital de dicho municipio y de la comarca del Deza.
Leyenda :
Situado en la parroquia de Santa Eulalia de Losón (Lalín,
Pontevedra), aproximadamente a unos 50 kms de Santiago, se
encuentra el santuario de Nuestra Señora del Corpiño, la más
reconocida virgen curadora del 'meigallo' (una especie de
embrujamiento) o también llamado 'ramo cativo' cuando afecta a
los niños que se quedan mustios, esmirriados, sin espíritu; este es uno de los
males más temido y de difícil curación en la Galicia rural, desde
tiempo inmemorial y contra el que se han escrito numerosas formulaciones
mágicas y la enfermedad síquica rural mas 'trabajada' por las
santas, meigas y curandeiras
Cuenta la leyenda que en el siglo VIII vivía por aquellos
parajes el ermitaño, Hermógenes, gran devoto de la Virgen, y cuyos
sermones eran escuchados con gran admiración por los vecinos de la zona. Un
buen día, el ermitaño dejó de predicar, y tal como se temía, fue
encontrado su cuerpo sin vida, pero extrañamente incorrupto, lo que
en el rural pasa a ser considerado automáticamente una especie de demostración
de su beatitud, un 'corpo santo', así que no queriendo los campesinos
hacer algo que supusiese profanar su última voluntad, decidieron darle
sepultura allí mismo y levantaron en su honor una capilla a la que pusieron por
nombre 'O Corpiño'. Cuando tuvo lugar la invasión de las tropas de Almanzor que
arrasaron entre otros lugares santos la misma catedral de Santiago, llegando
Almanzor a poner a beber su caballo en el agua de la pila bautismal,
los cristianos huyeron de estas tierras quedando la capilla abandonada a merced
de la maleza..
Ya en el siglo XII, unos pastores, buscando cobijo en una negra
tormenta se introdujeron en las ruinas de la capilla arruinada, pero fueron
cegados por una luz sobrenatural en cuyo centro vislumbraban a la
Virgen con el Niño y un ramo de flores.
Enterados los vecinos del suceso acudieron a la capilla haciendo la Virgen
su aparición por última vez en público ante los aldeanos reunidos.
En agradecimiento y respeto el pueblo
decidió levantar un santuario en su honor sobre las ruinas del antiguo.
Desde entonces se celebra allí la romería del Corpiño, a las
que acuden todas aquellas personas que padecen algún tipo de enfermedad poco
frecuente en busca de su curación (epilépticos, enfeitizados,
tangarañados, etc. todo un catalogo de enfermedades no reconocidas por
la medicina racional, pero que están presentes en la vida diaria del campesino
gallego y que no encuentra más remedio que aquí).
Una vez oída la Misa los enfermos protagonizan dentro y en el mismo atrio de la iglesia
una escena sobrecogedora de rapto, transcendencia, gemidos, blasfemias, vómitos
de bolas de pelo, abatimiento y convulsiones ante la presencia de la
imagen de la Virgen y de la cruz que la precede, con el fin de expulsar el 'meigallo' de
su cuerpo durante los cuales son ayudados por familiares o amigos que
contribuyen con sus rezos o golpes a la expulsión del demonio del cuerpo del
poseído.
Cuando esto ocurre el enfermo se revuelca por el suelo contorsionándose y
desarrolla una fuerza inusual en el, que debe ser controlada por 5 adultos
fuertes para que no llegue a hacerse daño en su debatirse, mientras algunos
echan incluso espuma por la boca, momento que es aprovechado por los
acompañantes para introducirle entre los dientes una moneda romana de
oro que hace las funciones de amuleto.
Cortesía de Santiago Sueiro
Presidente de Alianzagalega
Alianzagalega en la web