O
ROSAL
O Rosal (en castellano El Rosal) es una
localidad situada en la parte meridional de la comarca del Bajo Miño, en la provincia
de Pontevedra. Se encuentra a
orillas del río Miño, que hace frontera entre España y Portugal.
Este municipio está
formado por 4 parroquias, As Eiras (San Bartolomé), O Rosal
(Santa Marina), San Miguel de Tabagón (San Miguel) y Tabagón (San
Juan). Pias, Carrascal, Cotro.
Son afamados sus vinos que pertenecen a la
denominación de origen Rías Baixas.
Se han encontrado vestigios paleolíticos, que incluyen
pinturas rupestres, y de la Edad del Bronce.La cultura de los castros estuvo
muy presente en esta zona.
Durante la Edad Media perteneció al Monasterio
Cisterciense de Santa
María la Real de Oia.
El Real Monasterio de Oia es un antiguo
monasterio cisterciense fundado en el siglo XII.
Sus orígenes aparecen rodeados de incógnitas y de
noticias más legendarias que históricas. La primera noticia
documental existente de relativa fiabilidad que nos habla de una vida monástica
en Oia hay que situarla en el primer tercio del siglo XII, hacia el
año 1137, momento en que el rey Alfonso VII realiza diversas donaciones al
monasterio.
En el s. XVI acontece otro hecho a destacar en la
historia del monasterio, la leyenda de la Virgen del Mar, actual patrona del
Concello de Oia. ( Ver leyenda )
En 1847 se constituye el municipio
independizándose de La Guardia.
En 1879,
el rey Alfonso XII le otorga el
título de villa.
A
VISITAR :
Los
Molinos del Folón y del Picón:
67 molinos de agua declarados Bien de Interés Cultural (BIC) en 1998.
Monumento
a los tejeros de la
villa que crearon una jerga particular denominada latín dos cabaqueiros.
La
iglesia parroquial de Santa Marina.
La
casa consistorial, que ocupa un pazo
del siglo XVIII.
El
puente del Tamuxe,
construido en el siglo XIX sobre un anterior puente romano con modificaciones
debidas al deterioro causado por los accidentes automovilísticos.
Mirador natural de "Niño do Corvo" (Nido del Cuervo).
Como curiosidad aquí nació el famoso
aguardientero : Aurelio Martinez Martinez.
Leyenda: La Virgen del Mar de Oia
.Nuestra Señora llamada del Mar o del
Destierro que así se denomina la imagen que según la historia apareció en
la playa, «la orilluda», junto al
monasterio de Santa María de Oia en
1581. ( Tal y como me la han contado la relato ).
Manoliño y Genarin (dos agricultores de
O Rosal), se dirigen a podar las vides que tenían en unos barrancales que dan
al acantilado de la costa del océano Atlántico.
Este acantilado
era llamado O Acantilado da Oilluda, a lo que debe su nombre Oia.
En las horas de
la poda, lo solían hacer cuando la mar estaba baja, por lo que fue posible ver
desde la distancia el reflejo del mar sobre todos los acantilados.
Como a mitad del acantilado vieron unos
destellos que salían de entre los peñascos del acantilado, casi en la
orilla del mar y decidieron acercarse para ver lo que era.
Al acercarse
vieron perplejos una imagen de una virgen
unida a un lebrel , por un collar de conchas de vieiras.
Manoliño le dijo
a Genarin de rescatarla y entregársela a los cistercienses del monasterio y con
mucho trabajo la subieron al camino, rescatándola de los pedregales tanto a la
virgen como al lebrel.
Tras rescatarla,
al llegar al plano del camino el canido
vuelve a la vida y la transporta a lomos hasta la puerta del monasterio,
donde volvió a su primitivo estado.
Los monjes tomaron
pues desde la puerta del monasterio, sobre sus propios hombros la imagen y la
condujeron a la capilla principal , lo que hoy es la de la Virgen.
Toman como
milagro el hecho de que no se hiciera pedazos en los escarpados acantilados de
la zona además del hecho del transporte
a lomos del canido, aunque lo que quizás muchos no supieran
entonces es que miles de imágenes surcaban el mar a consecuencia de la subida
al poder en gran Bretaña del puritano Cromwell y la furia iconoclasta de este
que vació de imágenes las iglesias británicas.
Mi
opinión es que fue una de las imágenes profanadas en Inglaterra por los
protestante, pues apareció atada con una cadena a un lebrel muerto.
Al cumplirse el
siglo del hallazgo, suspirando los monjes por tener una copia de aquella imagen
aparecida, hicieron en Salamanca una y es la que hoy se halla presidiendo el
retablo mayor de Oia, en tanto que la auténtica se venera en
el Monasterio de Jesús, de religiosas cistercienses de Salamanca.